-¿Qué?
-Si estuve en la cárcel, como una vil delincuente.
-¿Por qué?
-Por peleonera.- Dijo Bill
-Insisto, ella empezó. –Dijo Camila.
-Lo peor es lo que paso después.-Comento Sarahi.
-¿Qué paso?-Pregunto Andreas.
-Tom saco a Camila de prisión y pago la multa, así que Camila le pagara a Tom siendo su esclava por dos largas semanas.-Dijo Bill.
-¿Qué?
-Si.-Dijo Sarahi.
-Bueno Camila, creo que serán las peores dos semanas de tu vida.
-Gracias por recordarlo.- Dijo ella.- Hablando de eso ¿Dónde esta?
-¿Quién?-Pregunto Gordon.
-Tom
-Esta en el jardín.- Respondió Bill.
-De repente se puso muy serio.- Comento Sarahi.
-Oh, deja voy.- Dijo Camila, se puso de pie y salió al jardín.
-Hola.- Le dijo Tom al verla cruzar la puerta del jardín.
-Hola, ¿Estas bien?-Le pregunto.
-¿Yo? Si solo me quede aquí pensando.
-Oh, ¿Prefieres estar solo?
-No.- Dijo el inmediatamente.
Camila se sentí a su lado y se quedo callada por unos segundos. -¿En que pensabas?
-En algo que me dijiste en la mañana.
-¿Yo? ¿Qué dije?
-Dijiste que jamás te acostarías con un chico como yo.
-Oh, eso
-¿Cómo es un tipo como yo?-Ella se quedo callada.- Dime.
-Tu eres el tipo de hombre que solo busca a una mujer para tener únicamente sexo, al punto de vista femenino tu usas a la mujeres para tus propios placeres sexuales.
-¿Y tu, que tipo de mujer eres?
-¿Yo?- El asintió.- Yo soy el tipo de mujeres que cuando esta con un hombre hace el amor, no solo por sexo.
-¿Hacer el amor?
-Si hacer el amor, disfrutar a tu pareja, conectar no solo físicamente también emocionalmente, ser uno solo.
-Yo complazco a las mujeres.
-Yo no niego que no lo hagas pero solo lo haces temporalmente.
-¿Temporalmente?
-Placer físico, no placer emocional, ese es el placer que tu no das o dime ¿Has hecho el amor con alguien?
-¿Hacer el amor?
-Si, ¿Lo has hecho?
-Yo, no lose.- Dijo el seguro.- Yo creo que si.
Camila rio.- Tom ¿Te has enamorado?
-Enamorado, no.- Dijo el.- No de esa manera, ¿Y tu?
-Yo, si lo estuve una vez.
-Y ahorita ¿Lo estas?
Camila se quedo callada, pensando.- Yo, no lo creo. –Ella se puso de pie y entro en la casa.
El observo como ella entraba y cerraba la puerta, antes de dar la vuelta ella lo volteo a ver.-Yo creo que si.-Dijo el, para si mismo.
Los días pasaban en la casa, Tom y Camila estaban mas unidos que antes, siempre estaban juntos peleando, hablando, jugando, platicando, no importaba como pero siempre juntos. El resto de la familia no volvió a tocar el tema de los sentimientos, optaron por darle tiempo al tiempo.
Era jueves y solo estaban Bill y Tom en la casa. Bill estaba escuchando música cuando escucho el teléfono sonar. –Hola.- Dijo el al contestar.
-¿Bill? Soy Camila.
-Que paso pequeña
-Oye, solo hablo para decirles que no pasen por mi, Fabrizzio me invito a comer y me iré con el.
-Ah ok, ¿A donde iras?
-No lose, llegare temprano.
-Ah ok, con cuidado nada mas.
-Si, adiós gemelo menor.
Bill corto la llamada y fue a la cocina por algo de comer, saco una botella de agua y la abrió. Vio entrar a Tom en la cocina. -¿Qué ora esa?-Pregunto el mayor de los gemelos.
-Medio dia.
-Se me hizo tarde.
-¿Tarde para que?
-Para pasar por Camila.
-Ah, ella acaba de marcar, Fabrizzio la llevara a comer y vendrá mas tarde.
-¿Qué? ¿Con el? ¿Quién le dio permiso?
-Tom, no tiene que pedir permiso
El lo ignoro. -¿A donde fue?
-No me dijo.
El se quedo pensando en los lugares que ella conoce y a demás que le gustan, como estos son pocos fue fácil suponer a donde pedirían que la llevaran.-Creo que ya se donde esta.- Dijo el apunto de salir de la cocina.
-Tom, no me digas que piensas ir a buscarla.
-A buscarla no, voy por ella, a lo mejor no tiene como regresar a casa.
-Tom
-¿Qué?
Bill se quedo callado unos segundos.- Espera voy contigo.
-Bueno, bajo en 10 minutos.- Tom subió los escalones mientras Bill se quedo ahí burlándose de manera discreta de Tom.
Bill espero menos de diez minutos y vio Tom bajar con lentes de sol y gorra.- Vamos.-Dijo el mayor de los hermanos.
Bill tomo sus lentes de sol y salió de la casa detrás de Tom.
En el café Camila y Fabrizzio platicaban.
-¿Y que vas a hacer esta semana?
-Me quedare aquí, mi mamá tiene trabajo en México y no me podrá atender así que mejor me quedo.
-¿Y porque no fuiste a Londres?
-Solo iban puras parejas o futuras parejas, no quería hacer mal tercio.
-Oh, podemos salir nosotros.
-He, si claro, nos ponemos de acuerdo.
El se le quedo viendo, le gustaba esa chica y mucho.- Sabes a veces pienso que me evitas.
-Yo, evitarte claro que no.
El le iba a decir algo pero en eso les dejaron la comida y ella empezó a comer de inmediato.
Tom y Bill estaba estacionado afuera del café donde se encontraba la chica, el mayor de los gemelos observaba cada movimiento de la joven tratando de descifrar los que ella decía.
-Tom ¿Qué vas a hacer?-Le pregunto Bill a Tom callado.
-No, lose
-¿No piensas bajar?
-Si, pero estoy pensando como, acuérdate que el no me puede ver.
-Si quieres yo bajo, es mas fácil que yo pase de desapercibido que tu.
-Eh no, ya se me ocurrió algo.
Tom bajo de la camioneta camino hacia la cafetería.
-Nunca me has dicho como es la familia de donde vives.-Le decía Fabrizzio a Camila.
-Es que no hay mucho que decir, son una familia normal.
-No lo creo, es una casa muy grande.
-Eh si un poco.
-Sarahi una vez dijo que cada una tenía su propia habitación.
-Así es.
-Y a parte están lo hijos.
-Eh si, la verdad es que la casa si esta un poco grande.
-Son gente de dinero.
-Es una familia que trabaja mucho.- A Camila le empezaba a molestar la insistencia de Fabrizzio en hablar de la familia.
-¿Qué hacen los hijos?
-Ahorita nada.
-¿Y que.- Comenzó a decir Fabrizzio.
-Fabrizzio, no quiero ser grosera, pero no me gusta hablar de ellos, es su vida y no me gusta decir cosas que no me pertenece decir.
-Lo siento.-Se disculpo.
-No hay problema.- Dijo ella
Para cambiar el tema.- ¿Quieres un helado?
En ese justo momento Camila vio entrar a Tom a la cafetería, según el despistadamente pero no pudo evitar voltear a ver hacia donde estaba la chica.
-No lo puedo creer.- Dijo ella.
-¿Qué paso?
-Eh nada, si me disculpas, voy a comprar algo, ahorita regreso. -Ella se puso de pie y camino hacia la caja de la cafetería. – ¿Qué haces aquí?
-Vine a comprar un helado.
-Si claro, ¿Vienes solo?
-No, Bill esta en la camioneta.
-¿Por qué me vigilas?
-Ya te he dicho que no te vigilo, solo te cuido.
-¡Tom!
-Ya te he dicho que el no me da buena espina.
-Y yo ya te he dicho que no lo conoces.
-No vamos a pelear por el, mejor vente con migo.
-¿A dónde?
-Una sorpresa, vamos.
Camila volteo a ver a Fabrizzio que la observaba. –Ve al baño, ahorita te veo ahí.
-No tardes esclava mía.
El camino hacia los baños y Camila regreso a su lugar.
-¿De que hablaban?-Le pregunto el italiano a la joven.
-¿Eh?
-Si, el chavo que estaba a tu lado te decía algo.
-Ah, nada en especial, mas bien no le entendí.- Dijo ella. –Deja voy al baño, ahorita regreso.
Ella camino hacia los baños y vio a Tom ahí.
-¿Lista?-Le dijo el
-Estas loco, mejor dime porque estas aquí, ¿Cómo supiste donde estaba?
-Eso no importa, yo nada mas vine por ti.
-Tom
-Vámonos ya te dije.
-No, ¿Qué crees que siempre voy a hacer lo que tu me pidas?
-Vamos Camila.
-No Tom, vete.
-Esto a Tom le molesto, acorralo a la chica en la pared. -¿Quieres estar con el?
-Tom el es mi amigo.
-Camila, mejor hay que irnos.
-No Tom ¿Qué le voy a decir a Fabrizzio?
-Que importa.- El se acerco mas a ella y esto la puso nerviosa. –Vamos.
-Tom.
-Vamos pequeña
En eso timbro el teléfono de Camila. –¿Hola?
No hay comentarios:
Publicar un comentario